Mi universo y el de muchos otros es de palabras.
Palabras dulces, calladas, o casi mudas; altas gritonas y que rompen ventanas. Palabras de consuelo, de aliento o de esperanzas perdidas a la vuelta de la esquina. Palabras fugaces, soñadas o que inspiran locura. Con una palabra te saludo, te perdono, te traiciono o te juzgo. Con una palabra te hago la persona más feliz del universo o rompo el resto de las ilusiones, esas que todavía están escondidas en aquel rincón claro de tu alma. Con mis palabras te puedo hacer sonreír, esas serían palabras muy difíciles de encontrar pero que valen la pena. Con tus palabras me puedes hacer sentir como de cristal pintada de arco iris, con otras me haces caer encima de mis propios añicos.
Existen palabras lindas, feas, empalagosas, y otras muy directas. Algunas llenas de dudas, rencor, miedo o verguenza.
Aveces, la mayoría del tiempo sólo unas pocas me bastan, pero otras veces sólo sueño con una: LIBERTAD.
Libre de soñar.
Libre de gritar.
Libre de ser yo.
Libre de mis pensamientos.
Y soñarla no basta...
by: caami obiamente
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